Un Hórreo en Moratilla

Hace aproximadamente un año, llego a mis oídos la noticia de que un amiguete mío estaba construyendo un “Hórreo”. No me constó mucho comprobar si era verdad o no, pues la persona en cuestión era “El Sito”, entablé conversación con él y me explico el porque y como lo estaba haciendo.

La construcción se encuentra en Moratilla, muy cerca de Sigüenza, en un terreno de su propiedad. El Hórreo en cuestión, es parecido a los hórreos asturianos, pues tiene una forma cuadrada. Tiene unas dimensiones de: 4 metros por lado, lo que hacen 16 metros cuadrados.

La base son traviesas de la vía del tren, un total de 8 uniendo el suelo del Hórreo con el terreno a modo de pilares. A su vez la base del suelo del Hórreo esta formada por traviesas. Un techado a cuatro aguas, y una ventana por cada lado. Prácticamente esto es lo que vi la primera vez que lo visité (estaba en plena construcción), el techado al interior es completamente de madera, y en el exterior recubierto con onduline (para el agua).

Es puente pasado tuve noticias de que el Hórreo ya estaba terminado, y fuimos una tarde unos amigos a verlo y a merendar con El Sito. La sorpresa fu grata, pues la construcción en sí tiene su miga. El tejado lo quería haber puesto de pizarra, pero por el peso y porque le calaba, decidió hacerlo de teja rustica. Los dinteles de las ventanas y de la puerta son de Sabina, un árbol muy preciado por la excelencia de su madera. En estos dinteles ha labrado símbolos Celtas.

Las paredes del Hórreo han sido forradas con cemento y paja a modo de adobe. En el interior tiene una magnifica chimenea acompañada de un pequeño horno. El suelo es todo de tarima flotante exceptuando el rincón de la chimenea y la entrada. En la parte de la entrada ha hecho una pequeña terraza con sus escaleras para acceder al Hórreo.

Este puente pudimos disfrutar en su interior de un buen jamón, un buen queso, regados por un gran vino.

Que grande Sito.