Dulzainada en Talavera

Desde tiempos inmemoriales se celebra la fiesta de las mondas en Talavera de la Reina, era una fiesta celtíbera dedicada a la diosa Ceres, luego los cristianos, como han hecho con multitud de fiestas paganas la convirtieron en la festividad de la Virgen del Prado. Esta fiesta se celebra siempre la semana después a la semana Santa, pero lo que a nosotros nos ocupa es simplemente el sábado después de semana Santa.

Dicho día, se celebra un pasacalles por la ciudad de una hora y media de duración, aproximadamente, en él desfilan multitud de grupos de dulzainas, entre los que destacan: Los Talaos, Mahourotos, Gaiteros de Mira sierra, etc.

Yo tuve la oportunidad de ir con la escuela de folklore de Guadalajara, desde estas líneas les agradezco la invitación.

Eramos unos 16, de los cuales 12 nos quedamos a pernoctar la noche del sábado. Llegamos a Talavera sobre las 12, fuimos a los apartamentos que teníamos alquilados a dejar nuestras cosas, y depuse a tomar un ligero vermouth, pues a las 5 empezaba el pasacalles. Después de comer algo, comenzó el pasacalles, nosotros íbamos en el quinto lugar. Para mí era un placer tocar el tambor, con mi profesora Sara, y delante de tanta gente, pues a lo largo del recorrido hay por lo menos 3 o 4 filas de gente a cada lado. Una vez finalizado el pasacalles los dulzaineros quedamos todos en un mismo bar, en el cual entre cerveza y cerveza, se podía oír el sonido de la dulzaina: cerveza, baile, caña, dulzaina, la verdad que de los mejores ratos de todos estos eventos.

Mientras el resto de dulzaineros acudían a una recepción, nosotros nos apresuramos a ir a cambiarnos y dejar los instrumentos, salimos sobre las 10 y nos fuimos a cenar.

Estando sentados en el bar esperando que nos sirvieran la cena, entraron a ritmo de Dulzaina, Los Talaos, y la escuela de dulzaina Plaza de Castilla comandada por Javier Barrio. Era un lujo estar cenando mientras te tocaban dulzaineros de tal categoría. Después de la cena, la fiesta se alargo en el mismo bar, hasta las 2 de la mañana, bailando jotas, rumbas, bailes corridos, etc. Era un placer escuchas el sonido de la dulzaina que le sacan Carlos Sánchez y Fernando Llorente (los Talaos).

Depuse nos fuimos de copas por Talavera, a la que nos acompañó Carlos, un tipo excepcional, solo le conocía de verlo en los discos de los Talaos, etc. Pero demostró ser una persona inteligente, y con la que se puede charlar a la vez que tocar una copa. Los 12 de Guadalajara aguantamos casi hasta las 8am, entre los que me incluyo yo, y el Moro (presidente de la Zorra Alkarreña) y Nacho.

La verdad que fue un placer, estar y conocer una nueva fiesta de Dulzaina, además de ver a viejos conocidos, como Barrio y conocer a gente como Carlos y Fernando de los Talaos. La pena fue, que al coincidir con el 23 de abril, muchos dulzaineros, como los Ramos, optaron por ir a Villamar y dejar de lado Talavera, pero ya nos veremos en otra.

NI UN FIESTA CASTELLANA SIN DULZAINA